La nariz es una parte importante de nuestra cara y es normal fijarse en ella, tanto en la nuestra como en la de los demás y no estar a gusto con tu nariz puede causar muchas inseguridades.
Si no te atreves con la cirugía, la rinomodelación es un tratamiento no invasivo, rápido y con resultados inmediatos muy satisfactorios. Permite levantar la punta de la nariz, corregir el caballete u otras imperfecciones, sin necesidad de pasar por el quirófano, a través de un procedimiento de aplicación de relleno prácticamente indoloro, se crea una armonía con el rostro de manera cómoda y sin anestesia.
La rinomodelación consiste en inyectar Cristalys o ácido hialurónico (sustancia de relleno, biocompatible y no tóxica) en la zona a remodelar para ajustar o corregir la nariz de forma adecuada a la fisionomía del rostro.
Con un efecto visible de inmediato, en pocos minutos, los resultados son evidentes y a menudo sorprendentes. Como la sustancia suministrada por infiltración es reabsorbible por el cuerpo, requiere mantenimiento pasados unos meses (entre 8 meses y un año y medio).
Grado de dolor: Prácticamente indoloro
Tiempo de recuperación: Es posible que aparezcan hematomas leves y rojeces, que desaparecen al cabo de unas horas
Duración del tratamiento: Depende del paciente
Duración de la sesión: 30-45 minutos
Sensación: Ligeros pinchazos, muy suaves
Efectos: Eleva de la punta de la nariz, elimina o reduce el caballete e imperfecciones, Resultados Inmediatos. Algunos meses después conviene hacer sesiones de mantenimiento
– Usar protección solar.
– Mantener la piel hidratada.
– Consultar compatibilidad con algunos medicamentos.
– No realizar otras infiltraciones.
- Mujeres embarazadas o en periodo de lactancia
- Personas con infecciones cutáneas activas que presenten signos de rellenos previos permanentes
-Personas enfermas de cáncer, con enfermedades autoinmunes o que tomen anticoagulantes.